Elegir formas y colores para un mandala – cosas que hay que saber
Mucho más que meros dibujos, los mandalas son figuras que expresan las fuerzas intangibles que nos rodean. Para los seguidores de estos motivos, representan una especie de imagen colorida de la naturaleza. Reflejan la energía del universo así como del cosmos. Aquí está cómo reconocer su significado.
Origen de los mandalas
Se originan en la época del desarrollo del Hinduismo. Durante un largo período de tiempo, los creyentes de esta religión habían recurrido a estos motivos. Les permitían invocar a las deidades antes del culto. Eran figuras (o esculturas) con un significado espiritual propio. Se suponía que su uso ayudaría a un individuo a entrar fácilmente en un estado de meditación.
Para los que no lo sepan, el término “Mandala” proviene de un antiguo idioma de los brahmanes de la India. Esta gente hablaba “sánscrito” y a menudo usaba esta palabra para referirse a algo sagrado. En el dialecto de hoy, mandala significa “círculo” o “ambiente” o en nuestro caso “esfera”.
Los hindúes y los budistas en el país de las especias todavía las usan como áreas rituales. Según ellos, las ilustraciones tienen poderes especiales. Estos dibujos también se pueden encontrar en la arquitectura cristiana contemporánea.
Los diferentes tipos de mandalas
Hoy en día hay aspectos típicos de los mandalas. Por ejemplo, hay símbolos de religión, especialmente en el budismo tántrico y el hinduismo. Su estructura evocaba un lugar de encuentro entre lo humano y lo divino. El famoso Templo Toji de Kioto tiene una figura espectacular. Consta de 21 habitaciones y se extiende hasta 35 m. Consiste en una amalgama de figuras dispuestas de forma centrada y orientada.
Las obras pueden hacerse en dos dimensiones en papel de seda. Además, se presentan en 3D en forma de estatuillas de madera. Los mandalas simplificados también se pueden encontrar en forma de mosaicos, como en las iglesias católicas.
Las diferentes categorías de mandalas
Estos patrones pueden tener formas características complejas. Y es importante saber que cada matiz geométrico o de pintura puede cambiar el significado mismo de la cosa. Los diferentes diagramas que componen un mandala no se dibujan por casualidad o por simple inspiración. De hecho, el intérprete que tiene que hacerlas depende de su espíritu interior más que de su talento. Las deidades expresan para ciertas figuras la gentileza, la energía, la compasión o el discernimiento. También evocan la fuerza así como todos los aspectos del subconsciente divino y humano.
Para los practicantes de yoga más experimentados, las ilustraciones sugieren un conjunto de resplandor mental y sensorial. Reflejarían el ser enterrado dentro de cada uno de nosotros. Los seguidores percibirían entonces una parte de sí mismos a través de estos coloridos símbolos. De esta manera, contemplaron su estado mental. Si juzgaban que su representación era “impura”, se purificaban para acercarse a la iluminación. Aunque para los pintores modernos, los diagramas son considerados mayormente como arte y no como un canal espiritual.
Significado de varias formas
La forma de un mandala a menudo se muestra en un círculo. Es un símbolo del tiempo y del cielo. También puede evocar la defensa de las ciudades y de la gente que vive en ellas. En los frescos cristianos, ilustra la eternidad. Si se combinara con el cuadrado, los motivos tomarían un significado diferente. De hecho, este arreglo es una señal de cambio y pone de relieve el movimiento.
También puedes tener una estructura estelar en un mandala. Significa luz y representa una guía para el hombre. Pequeña anécdota, la contemplación de la Osa Mayor fue utilizada como medio de orientación. Pero las imágenes que definen una estrella aluden a la Estrella Polar, presentada como el giro del firmamento. La posición de las otras estrellas celestiales se localiza refiriéndose a ella.
El cuadrado simboliza la estabilidad y la tierra. Ilustra todo lo que está firmemente en su lugar. En cuanto al triángulo, es sinónimo de perfección para los demás (los hebreos). De la misma manera, puede indicar armonía y unidad.
Una simple declinación de un patrón cambiaría el significado de un mandala. Es por eso que tienes que elegir el que mejor se adapte para expresar el sentimiento. Por lo tanto, es posible reunir diferentes formas si se quiere transmitir un mensaje. La única condición a seguir es obtener un resultado apreciable para las partes interesadas.
El significado de las sombras
El la mejor coloración de mandala resulta de la combinación de los diferentes elementos de expresión utilizados. El rojo simboliza la vida y manifiesta salud, alegría y triunfo. También puede reflejar el fuego y la ira. Si cobrara vida, el significado podría ser la actividad, la incandescencia o el amor.
El naranja se muestra como un matiz del buen humor y el bienestar de una persona. Ilustra la revelación en algunas culturas y es una figura de la iluminación divina. Los monjes budistas usaban túnicas de azafrán para declarar su camino a la emancipación.
El amarillo se refiere a la luz del espíritu. También es el atributo de la realeza y la nobleza en ciertas prácticas. En China, sólo a los emperadores se les permitía usar ropa de este tono. Es una forma de mostrar su autoridad sobre sus súbditos. Este color también puede caracterizar al sol, fuente de vida y conocimiento para los egipcios y los indios cherokees.
En cuanto al verde, simboliza la regeneración del alma y la resurrección. Desde esta perspectiva, los sacerdotes católicos solían llevarlo para recordar la victoria del “Hijo” sobre la perdición. En otras religiones, el verde es el emblema del renacimiento y la eternidad.
Para el azul, evoca la inmortalidad en la cultura egipcia. Este color ilustra la calma y la paz, especialmente en la mitología griega para representar a los dioses Júpiter y Juno. También puede ser sinónimo de pureza y sabiduría. El agua tiene virtudes refrescantes y nutritivas. Ahora que sabes todo esto, podrás expresarte libremente a través de tu arte y compartirlo con el mundo.